Filipponi, Franco
Santiago de Chile, 1979
Residente del tallerBDN de diciembre 2010 hasta abril de 2011
Diplomado en Escultura en Hierro por la Universidad Católica de Chile (1998), Licenciado en Bellas Artes por la Universidad Finisterrae de Chile (2002). Ha cursado el ciclo formativo de Artes Aplicadas en Escultura en la Escuela Massana de Barcelona (2005). Ha colaborado con artistas como Ivan Diver y Catalán Gabriel, entre otros. Ha participado en la exposición Colectiva de Escultura en la Universidad Católica de Chile (1998). Ha realizado exposiciones individuales en el Pabelllón de Ciencias esotéricas de Chile (1998) y en el Estadio Italiano de Chile (2003). Ha participado en la Colectiva de Forja en el Local Social del Eje Comercial del Raval (2009), en la Colectiva Forja Viva en el Museo Marítimo de Cataluña (2010) y en la Colectiva Feria Monográfica de forjadores en Besalú (2010). Su exposición individual Reintegració al Caos se realiza en el Museo Etnológico La Gabella de Arbúcies (2009)
Proyecto Obelo
“Trabajaré en torno al concepto de la verticalidad entendida como gesto patrimonial de la escultura, el cuerpo adopta ésta posición al caminar o al estar de pie, es signo de vitalidad, de vida, de historias que pasaron, de la permanencia de un ideal señalado en un lugar, indica la dirección del cielo y nos recuerda y conecta con la metáfora de lo divino.
Creo que a través de la verticalidad el humano edifica una imagen de si mismo justificando o intentando explicar la razón de su existencia ya sea por ansias de grandeza o por el simple gesto de dejar una señal en el camino, un hito, un mojón.
Obelo rompe un gran silencio en cuanto a la realización de una escultura de gran formato, (medidas aprox. 2,40 x 1,80 m) dimensión en la que puedo expresar, porque sé desplegar mi energía, mi lenguaje constructivo.
Por esto la pieza en sí es un hito, una señal en mi camino, un faro, mi escudo, un acto de autoconvencimiento, una acción de fe absoluta y el reflejo consciente de la sacralización del trabajo escultórico, de la liturgia de las horas de trabajo.” (Franco Filipponi)